En este período desafiante en el que las organizaciones luchan por superar la incertidumbre, reducir el riesgo y aprovechar las oportunidades de supervivencia y, con suerte, de crecimiento, no sorprende que muchas voces clamen por una práctica de liderazgo más consciente.

Los líderes de todo el mundo están llamados a aumentar su conciencia y, además de mostrar fuerza y competencia, mostrar empatía y responsabilidad colectiva.

Tal vez lo que es sorprendente, de una manera agradable si me preguntas, es el hecho de que el liderazgo consciente se generalice antes de lo que piensas. El hecho de que una revista de negocios de referencia como Forbes haya estado publicando varios artículos sobre el tema puede probar mi punto.

Artículos como el de Eric Kaufman, quien presenta tan bien los 4 elementos centrales del liderazgo consciente para que los ejecutivos naveguen por las crisis y reduzcan la incertidumbre sin dejar de servir a su personal, accionistas y comunidades:

Propósito y valores:
Debido a que los tiempos actuales dificultan articular una visión clara, Kaufman sugiere que aprovechemos la energía del propósito (por qué hacemos lo que hacemos) y la guía de los valores (cómo trabajamos hacia el propósito). En un futuro incierto, su propósito y valores son guías claras para decisiones, elecciones y relaciones.

Inteligencia colectiva:
Los líderes conscientes saben perfectamente que la adaptabilidad a las nuevas circunstancias depende de la diversidad de pensamiento, enfoque y perspectiva. Ya no se recomiendan los solos. Al hacer preguntas y respetar las opiniones de los demás, el genio colectivo incluye al CEO junto con un grupo de miembros inteligentes del equipo que comparten el mismo propósito y valores.

Experimentos iterativos:
Conectado a los conceptos de liderazgo ágil, ahora no es el momento para un plan de tres años; es mejor tener un plan de 90 días que incluya muchas iteraciones con su equipo. Pruebe un nuevo enfoque u oferta, y si no funciona, ajuste rápidamente y adapte la oferta en la siguiente iteración.

Reflexión:
La velocidad es crucial en tiempos típicos para los negocios, pero en tiempos inciertos, la reflexión es la nueva moneda para los líderes. La reflexión convierte la acción en aprendizaje. La reflexión trae conciencia al momento presente y nos hace conscientes de patrones y lecciones. Requerirá que disminuyas la velocidad intencional y valientemente, mires hacia atrás y hacia los lados, y afirmes que las soluciones existen si nos abrimos a ellas.

Parece que los líderes más efectivos son maestros del cambio, la elección y la transformación.
Y también lideran con el nivel de conciencia personal necesario para inspirar e influir.

Citando a Kaufman, “un líder consciente se guía por la sabiduría, el amor y el coraje. La sabiduría surge del genio y la reflexión colectivos; el amor fluye del propósito y el coraje se muestra al iterar y experimentar. Estos elementos de liderazgo consciente producen una sensación palpable de control en medio de la incertidumbre”.

Entonces, bienvenido/a a la era del liderazgo consciente… ¿estás listo/a?